Va a ser...que este deporte engancha...¡¡¡PODEMOS!!!

Ayer por la tarde me descubrí a mí mismo, con la que estaba cayendo en la calle, con el aire acondicionado a to trapo y sudando encima de la bici que a su vez estaba encima del rodillo. Por un momento pensé: "Vamos a ver... ¿Tú no ibas a dejar la bici por este año después de la Sufrida?" Pues no solo nos hemos puesto una vezmás el dorsal, para el Veleta, sino que además estamos inscritos para la Perico (22 de agosto en Segovia...No digo ná el fresquito que tiene que caer por allí en la citada fecha) y encima estamos dándole vueltas a ir el 25 de Julio a Brenes (Sevilla, otro sitio fresquito). Y digo vamos porque como dice la coplilla (¿Verdad Jose Manuel y Miguel?) "No hay cabeza buena". En definitiva me hallaba yo un 6 de Julio, víspera de San Fermín, encima del rodillo haciendo series como si un buen morlaco viniese detrás. Amenizando las pedaladas estaba la primera semifinal del mundial Uruguay-Holanda. Entre pase de Robben y tiró de Forlan, pensé para mis entrañas: "Estoy cansao, ¿De qué será? ¿Tendré anemia? ¿No comeré lo suficiente?..." Esta última pregunta podría contestarla mi querida esposa, que sufre en mis interminables cenas de 2º, 3º, 4º y 5º plato con sus correspondientes postres (Es que la fruta en verano apetece). De repente caí, al apuntar los datos del entreno en mi tabla, que llevaba 4 días seguidos de entreno, el sábado 112 Km con sus repechos, subida a Medina, Paterna y el viento de cara, el domingo series en rodillo 1 hora, el lunes series en la cuesta de las Aguas y ayer martes series en rodillo otra hora; "Ya se de donde viene el cansancio. Es de la caló..." Enfermo, más bien enfermo diría yo, con un pensamiento completamente delirante, ronzando lo esquizoide (Esto último no es mío, lo he leído en algún informe del psiquiatra). Además me entró agobio porque el miércoles estoy de guardia y el jueves trabajo por la tarde, son dos días sin entrenar, "¿Cómo va a ser esto?".

Así que tras una ducha fría, después del calentón del rodillo, decidí que hoy y mañana no entreno. Además hoy es el día grande, nuestra selección: LA ROJA; juega la semifinal de un mundial ¿Cuándo volveremos a ver esto? Lo malo es que el fútbol conlleva un ritual de malos hábitos que están muy buenos, como la cervecita, las patatitas, etc... Y como no soy anoréxico, sino más bien lo contrario, no pongo pegas a nada porque después no sabes en qué repecho aquella patata que no te comiste puede faltar y ese gramo de azúcar que podría haberte catapultado a lo más alto se queda en una pájara de espanto, como la que me pillé el otro día en las Aguas y tó por una barrita que no llevaba, claro.

Este fin de semana si todo va bien y no hay ningún contratiempo nos daremos unas vueltas por los míticos puertos gaditanos, intentándo emular al Contador...más quisiéramos. Por cierto, ahora que Cancellara es rival de Contador, ya no me cae tan bien, ahora que espectáculo la etapa del Tour de ayer, nada más ver los adoquines me entraba dolor en cierta parte noble.