domingo, 6 de septiembre de 2009

El nuevo mundo.

Lugar de inicio rotonda del 501. Hora 8 de la mañana. Tiempo soleado, buena temperatura incluso un poco de fresco para el comienzo, amenaza viento de levante aunque a esa hora totalmente calmo. Buenas caras en el pelotón.
Recojo a Miguel en la estación y ya de entrada nos marcamos un buen ritmo falso llano arriba para no llegar muy tarde... Otro día más sin calentar, ni ná. Antes de la rotonda ya vemos al Maestro (Manolo) dando una vueltecita avenida abajo, con cara de ¡Qué pasa aquí todo el mundo llega tarde! Arriba en la rotonda nos reunimos, Jose llega un poco tarde, no se encuentra bien medio griposo (por supuesto gripe A) y embotao del atracón de comida China de la noche anterior. Tras los saludos iniciales y la reunión acerca de la ruta a seguir, nos ponemos en marcha.
Al principio lo de siempre, vamos a calentar, con tranquilidad, charla, etc... Pero nada más lejos de la realidad, al poco ya estamos a 35 Km/h subiendo y bajando toboganes camino de Lomopardo.
La subida al repecho de la famosa pedanía Jerezana como siempre al principio bien, el segundo repecho es el más duro, entre otras cosas porque Miguel se encarga de darle un poco de vidilla con algún que otro arreón a los que no puedo resistir intentar seguir.
La carretera de Estella a La Barca, que al parecer están ampliando para alegría mía (la odio profundamente por historias que no vienen al caso como por ejemplo por los extraños sucesos de los perros atropellaos, la ausencia de cuneta y sobre todo por un fenómeno que todavía no me explico ¿porqué cuanto más estrecha es una carreta, más corren los coches por ella?), me sorprende gratamente, hay poco tráfico y se puede circular mejor. El repecho inicial, comienzo a dar un poco de caña, buen ritmo, luego viene bajada en la que el Maestro y Miguel se salen poniéndonos a cincuentaytantos. Llegamos a La Barca, Jo... ya nos hemos comido los 15 Km?, a la entrada recuerdo al grupo que es travesía, no nos vayan a quitar los puntos. En seguida estamos en la venta, yo la llamo, Venta el Cruce (no sé si se llama así).
Tras el polvoriento desayuno (vaya el de la escobita) y programar el evento de la semana que viene (La Marcha J. Ramírez Abeja de Lora del Río) nos movemos. El Maestro debe abandonarnos ya que tiene eventos sociales a los que asistir (La barbacoa de la que ya veremos si los asistentes, yo no pude por problemas logísticos, nos hacen algún resúmen o al menos fotos).
El pelotón continúa su andadura por una ruta menos conocida, cosa que suele ocurrir cuando nos quedamos sin voz de mando, je, je... Camino de Arcos de la Fra, carretera estrecha, sinuosa y con unas subidas de un par de co... No lo parecen al principio, pero según vas andando no se acaban nunca... Comienza a soplar viento, ahora no molesta mucho pero se empieza a avecinar una buena. A la llegada a Arcos, la cara de Josetxu lo dice todo, un poema, lo bueno es que se le había curado la gripe A de golpe, y los gobiernos buscando vacunas caras...
A partir de aquí ya si que entramos en un mundo desconocido, subimos a Arcos por la ruta histórico-Cultural, no conocíamos otra. Callejuelas adoquinadas o peor todavía, de cantos rodaos con un carrilito central de pavimento liso que resbalaba un güevo y parte del otro. Aquí pendientes de infarto pero con la vista fijada en llegar al Castillo de arriba. Muy bonito, Miguel va pidiendo a multitud de espontáneos que nos hagan fotos, incluso a uno que iba cargado de bolsas, la escusa de las bolsas no supuso ningún impedimento para que acabase echándonos unas fotos. Arriba en el famoso Balcón del Coño (perdón pero se llama así) nos dimos cuenta que hay otra subida más profesional a Arcos (queda pendiente para próximas ediciones, otra cosa más a la lista, me estoy estresando...).
A la salida del Pueblo decidimos parar en una gasolinera, por cierto hay que decir que tienía que ser al menos del siglo II A.C. No nos convence ni para tomar cocacola, solo tenían hidromiel y cosas de esas. Nos vamos a la de enfrente mucho mejor en todos los sentido, incluído el servicio y el personal, de lo que nos hemos traído un recuerdo.
Y ahora, ¿Cómo volvemos al Puerto? ¿Tendrá vía de servicio la autovía de Jerez-Arcos? Pues sí. Pasa por Jédula, aquí el viento nos dió la del pulpo, casi todo el tiempo de costado, pegando algún bandazo, y en algunos momentos de cara. Además un sol de justicia caía sobre nuestros esbeltos cuerpos lo que hacía el paseo más que agradable.
Llegando a Jerez, paradita en el Circuito para alguna foto más (la ruta iban tomando tintes turísticos) y finalmente de nuevo Estella del Marques, cruzándonos antes con una concentración de motos Vespa, iban por lo menos 500 (Alaaaaa) de todos los colores, formas, con sidecar, etc... Alguien, entre interrogaciones y exclamaciones, dijo: "Otra vez por aquí".. No te preocupes iremos despacio, con el plato pequeño y a marchetta. De nuevo Lomopardo, al revés en esta ocasión, con su impresionante repecho, en realidad es un efecto óptico aunque alguno no lo pudiera creer...
Luego lo de siempre, túnel del viento con viento de cara como de costumbre y carretera del Portal, interminable, insufrible, demoledora, todos los adjetivos le caben a este trocito que ya te va dando donde más duele, en lo más profundo de uno mismo.
Al final, como en la pelis, todo acaba bien, cervecita de rigor en El Navegante (a ver si nos patrocina unos maillots) y cada uno para su keli, eso sí, comprándo el pan antes...
En resúmen 120 Km muy agradables, la mitad por territorios conquistados, la otra mitad por nuevo mundo, pero sin duda una ruta más a incluir en el catálogo. Los nervios ya van aflorando para lo que nos espera la semana que viene.
Por cierto, la hoja de ruta del Domingo 13 de septiembre será:
- Hora: 6'30 a.m.
- Lugar: Rotonda del 501.
- Desayuno: El Fantasma.

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